Hacer una pechuga a la plancha y acompañarla con verduras está muy visto y llega a ser aburrido, pero si a los mismo ingredientes les cambiamos un poco la forma de cocinarlos y presentarlos, nos encontramos con un plato distinto y que puede llegar a tener un sabor totalmente diferente.
Las verduras hechas en el horno tienen un sabor riquísimo y hacen que las pechugas de pollo queden muy jugosas.
Utilicé unos trozos de queso curado que le daba un toque muy especial, pero se puede hacer con cualquier queso que os guste.
2 pechugas pollo
1 pimiento rojo
1 berenjena
4 lonchas queso
sal
aceite
4 cucharadas agua
Pasar por agua el pimiento y la berenjena y asarlos en el horno con un poco de aceite y sal durante 45’ a 180º modo ventilador.
Dejar que se templen un poco y quitarles la piel. Si se enfrían del todo cuesta más quitar la piel. Cortar las verduras en tiras.
Abrir las pechugas dejándolas de una sola pieza lo más plana posible.
Poner el queso y las verduras repartidas en el centro de cada pechuga. Sobrará un poco de verdura que se puede utilizar de acompañamiento.
Al dejar el relleno en el centro, cerrar con los laterales de la pechuga de forma que tape las verduras y el queso.
Poner en la sartén un poco de aceite y freír comenzando a fuego fuerte, para que se doren y se sellen. Terminar en fuego medio-bajo con la sartén tapada para que se haga el interior.
Una vez hechas retirar y echar las 4 cucharadas de agua en la sartén caliente. Dejar reducir hasta formar la salsa.
Servir caliente.
Puedes ver las fotografías del paso a paso en Ay Inesita.
Pues así deben estar exquisitas y bien jugosas.
ResponderEliminarBesos. Lola