pollo relleno de higos y queso de cabra

Me encantan los higos y la temporada pasada pensé en publicar algo con este fruto, pero me gustan tanto que al final nunca hago nada con ellos porque me los como antes de darles una oportunidad de ser parte de una receta.

Así que este año me puse seria y opté por hacer un plato, pero no quería una receta dulce, ni tartas, ni mermeladas, ni magdalenas ni nada que se le pareciera.

Los higos van fenomenal con el queso y se me ocurrió que podían ser un relleno perfecto para unos muslos de pollo deshuesado. Era una combinación genial y muy original, vamos no pensaba que había inventado la rueda, pero ya que por fin que me decidía a no comerlos antes de tiempo y utilizarlos para una receta, si creía que se me había ocurrido una muy original.

Pero esta mañana me he llevado una gran sorpresa. Después de las vacaciones y primera semana de trabajo, hoy he visitado blogs amigos y por supuesto he parado en Circus Day... y ahí me ha entrado la risa cuando he visto que Caty publicó hace unos días una maravillosa receta de pollo en salsa con higos y queso de cabra...¡¡¡y yo que creía que mi idea era original y genial!!!.

Así que esta es una pequeña muestra de como hacer diferentes recetas con los mismos ingredientes :)

5 muslos pollo deshuesados

8 higos

75 gr queso cabra

50 ml coñac/brandy

50 ml agua

Cortar los higos en gajos y quitar la carne. Reservarla.

Quitar la piel a los muslos de pollo. Poner encima de cada muslo unos trozos de queso de cabra y un poco de carne de higo, no se utiliza la de los 8 higos ya que parte se usa para la salsa.

Hacer un rollo con cada muslo y sujetarlos con palillos. No pasa nada si el relleno sale un poco.

Poner en una sartén un poco de aceite.

Dorar los muslos por todos los lados a fuego fuerte. Bajar el fuego y tapar la sartén para que se terminen de hacer los muslos por dentro.

Una vez hechos retirar de la sartén y reservar.

En la misma sartén, poner la carne de higo que ha sobrado. Añadir un poco de sal, el coñac y el agua.

Remover y dejar reducir durante un par de minutos a fuego fuerte. Pasar por la batidora y si ha quedado demasiado gruesa añadir un poco más de agua.

Servirlos calientes con la salsa de acompañamiento.

Puedes ver las fotografías del paso a paso en Ay Inesita.